PALACIO DE CARONDELET
Ubicacion: Calle Garcia Moreno y Espejo
El Palacio de
Carondelet abre sus puertas para actividades turísticas de lunes a viernes de
09h30 a 13h00, y de 15h00 a 17h00.
La entrada al
Palacio de Gobierno de Ecuador no posee ningún costo.
Descripcion:
En el año 1799 el
Barón Luis Héctor de Carondelet es designado presidente de la Audiencia y en el
año de 1801 contrata a Antonio García, de origen español, quien bajo la
dirección del Barón de Carondelet realiza los trabajos de readecuación y
mejoras en el Palacio de la Audiencia y
en la Catedral, además dirigió los trabajos en las arquerías del alcantarillado
y en la refacción del edificio de la cárcel.
Durante la época
republicana los presidentes constitucionales, interinos y dictadores han
despachado desde este edificio, que es la sede del Gobierno de la República del
Ecuador. Además, en el tercer nivel del Palacio se encuentra la Residencia
Presidencial, en donde vive, opcionalmente, el Presidente de la República.
Actualmente la
Presidencia y la Vicepresidencia de la República, así como el Ministerio de
Gobierno, ocupan el Complejo de Carondelet, que integra a los edificios del
antiguo Correo (en la calle Benalcázar, entre Chile y Espejo) y el Palacio de
Gobierno, separados por la cochera.
El palacio de
Carondelet, símbolo del Poder Ejecutivo y custodio de la historia democrática del
país por 264 años, se ha convertido en la representación de la imagen del
presidente Rafael Correa. Desde el 2007 el sitio se convirtió en una galería
que permite a los turistas admirar los casi 1.200 regalos que el jefe de Estado
ha recibido de los gobiernos de otros países.
Diariamente, tres
personas se encargan de conducir a los visitantes por tres pasillos de
Carondelet. El recorrido por el “Museo de la Presidencia de la República”,
denominado así por Decreto Ejecutivo, empieza con las palabras de uno de los
guías, quien “en nombre del presidente Rafael Correa”, dice él, da la
bienvenida a la gente.
El relato histórico
que hacen los guías se limita a tres aspectos: el significado de un mural
elaborado por el maestro Oswaldo Guayasamín a base de vidrio de colores, que
detalla el descubrimiento del río Amazonas por parte de Francisco de Orellana;
el origen francés de dos enormes lámparas de vidrio de color blanco que datan
del siglo XVIII y que iluminan el Salón de Banquetes y el Salón de los Presidentes;
y datos del oratorio que implementó el expresidente Sixto Durán-Ballén.
La última
remodelación que se realizó en esta administración incluyó el cambio del techo
por una delicada madera tallada, así como el tapizado de paredes y muebles con
telas de seda, provenientes de material nacional por “el sentido nacionalista”
que evoca el presidente Correa, dice el guía.
El palacio posee
tres pisos: el primero lo ocupa la Casa Militar, la Sala de Prensa, la
Secretaría Jurídica y otras oficinas; el segundo, el despacho presidencial, la
oficina de la primera dama, la Secretaría Particular y aquella de la
Administración Pública, los salones de Gabinetes, Banquetes y de Presidentes
(más como el Salón Amarillo); y el tercero está designado únicamente a la
Residencia Presidencial, “que el mandatario ha decidido no ocuparla”, aclara el
guía a los turistas.
Pero el eje de esta
exposición, denominada el ‘Ecuador es de todos’, es para exhibir los obsequios
que el mandatario ha recibido y que están celosamente guardados en vitrinas de
vidrio con luz tenue para evitar su deterioro.
De estos, el que
más sorprende es un reloj de oro adornado con diamantes azules, donado por el
gobierno de Rusia, que está en la Sala de Banquetes. A estos se suman monedas
de oro y plata, artesanías, vasijas de porcelana, entre otros.
El recorrido
continúa hacia el Salón de los Presidentes, que guarda en una de sus vitrinas
el reconocimiento Honoris Causa que Correa recibió de la Universidad de
Illinois (Estados Unidos) por ser un destacado alumno. Si bien el mérito
constituye un logro personal, reposa en Carondelet como uno de los símbolos
presidenciales.
El instructor
explica que todos los objetos “se dejarán aquí para que contribuyan al acervo
cultural, ya que el presidente no se los va a llevar al terminar su gestión; al
contrario de los otros mandatarios que los obsequios que recibían se los
llevaban”.
En las paredes del
área cuelgan retratos de 44 exjefes de Estado contados desde la época
republicana. El cuadro que llama la atención a un grupo de 20 turistas es el
del expresidente Abdalá Bucaram, cuyo fondo blanco contrasta con los colores
negros y azules utilizados por los otros mandatarios.
La curiosidad de
los visitantes provoca entonces una explicación puntual por parte del guía:
“Aquí solo están los cuadros de los presidentes que han sido elegidos
constitucionalmente, mas no de los presidentes interinos, dictatoriales...”.
No consta el
retrato del exmandatario Lucio Gutiérrez (SP); lo cual motiva otra precisión
por parte del exponente: “Él no ha querido enviarlo”.
Y para finalizar el
recorrido, que dura menos de 30 minutos, el guía informa a los asistentes que
el palacio no posee helipuerto, ni bóvedas de seguridad para así ahorrar
dinero.
Según el informe de
rendición de cuentas 2010 de la Dirección de Cultura de la Presidencia, Rafael
Correa ha recibido 1.197 obsequios y otros 820 de tipo reservados.
En el palacio de
Carondelet reina un ambiente de silencio. Sus huéspedes más importantes son el
jefe de Estado y colaboradores como Alexis Mera, secretario jurídico, y Vinicio
Alvarado, secretario de la Administración Pública, quienes mantienen reuniones
y conversaciones sobre el proyecto político, que no siempre trasciende a la
esfera pública.
El podio ubicado al
pie de las gradas que ascienden al segundo piso, y que en administraciones
anteriores era usado para divulgar los anuncios oficiales, desapareció en el
actual régimen. Sin embargo, a veces ronda por los pasillos Alexis Mera, quien
en contadas ocasiones se detiene y habla a los periodistas, como una especie de
vocero del Gobierno, informando sobre cambios en el gabinete ministerial y el
futuro de ciertas leyes, y de vez en cuando acuñando una que otra opinión sobre
los errores y aciertos de la Asamblea Nacional.
El Ejecutivo
contrató al director de Museos de Francia, Emanuel Starky, para mejorar a aquel
que está en la Casa de Gobierno ecuatoriano. La idea es trasladar en los
próximos años la sede política al sur de Quito, específicamente al complejo
militar Eplicachima.
Hasta tanto, la seguridad
es estricta para todos los visitantes y periodistas. Fue mejorada luego de la
revuelta del 30 de septiembre del 2010 con más cámaras para circuito cerrado y
la aplicación de tecnología avanzada para la Escolta Militar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario